¡Tenemos Papa matemático! Es una gran noticia. La ciencia matemática es una maravilla que no sólo sirve para aprobar o para conseguir un buen puesto de trabajo si no que también tiene la virtud de poder hacer inteligente a quienes la estudian y se acercan a ella. La inteligencia no lo es todo en la vida, por supuesto que no, hay otras mil virtudes y defectos humanos igualmente importantes; pero no podemos dejar de alegrarnos porque tengamos un Papa que comparte con nosotros el amor por las matemáticas: la forma pura, el vacío formal, ese esqueleto teórico que sostiene todas las demás ciencias, la ingeniería y por último la tecnología.
Que un matemático sea Papa es una evidencia más de que los matemáticos, ingenieros y asemejados también somos seres con una vida espiritual, con inquietudes existencialistas. Más allá del credo que cada uno profese (que siempre debemos respetar) está el hecho constatado de que la ciencia es bella y buena y... porqué no decirlo: el conocimiento científico tiene algo divino e irresistible para quien alguna vez lo ha probado.
Kepa Ríos Alday
No hay comentarios:
Publicar un comentario